6 de junio de 2010

GILES,GILES & FRIPP. Under the Sky, 1968. Thursday Morning, 1968. I talk to the wind, 1968.


Estamos en Agosto de 1967. Por aquella época, dos hermanos de la ciudad costera de Bournemouth, en el sur de Inglaterra, llamados Michael y Peter Giles, pusieron un anuncio en la prensa local buscando un cantante y teclista para su grupo. Ni corto ni perezoso, nada mas enterarse de la noticia, el Sr. Robert Fripp se presentó a la oferta y a pesar de no cumplir con lo fundamentalmente requerido, fue contratado de inmediato por su magistral y original forma de tocar la guitarra. La banda se formó con el nombre de Giles,Giles& Fripp y se trasladó a vivir a Brondesbury Road en Londres, poniéndose manos a la obra durante muchos meses, experimentado con su música y grabando infinidad de demos en cientos y cientos de metros cinta. Todo este trabajo fue reconocido y dio lugar a un contrato de grabación con la recién formada Dram Records, que era por aquel entonces una división de la gran discográfica Decca, dedicada a descubrir el talento de los grupos más innovadores y experimentales. En 1968 y tras muchos meses de arduo e inventivo trabajo, salió al mercado el álbum titulado “The Ceerful insanity of Giles,Giles & Fripp”. El disco a pesar de su fracaso comercial (al parecer se vendieron menos de mil copias) era un buen trabajo, una mezcla de sonido psicodélico jazzístico, barroco y progresivo, marcado por unas letras repletas de ironía y buen humor. Todo un divertido experimento, absolutamente original, un pequeño anticipo de las magistrales obras que estaban por llegar en los años y décadas siguientes. Efectivamente, en ese mismo año nacería “King Krimson”, una de las más famosas y originales bandas de la historia del rock sinfónico y progresivo. Del trío inicial, tan sólo el bajista Peter Giles quedaría fuera de la formación, siendo sustituido en sus comienzos nada mas y nada menos que por el magnífico guitarrista Grek Lake, músico,cantante y compositor, mas tarde pasaría a ser uno de los tres componentes de los monstruosos Emerson,Lake & Palmer.
“Under the sky” por ejemplo, es un lento e hipnótico tema, interpretado de forma magistral,una muestra de talento primitivo, todo él suena a 1968. Un misteoso himno a la Creación. Cantado bajo un cielo protector. Cuando todavía era posible cambiar el Mundo. En “Thursday morning” la excelencia vocal sobresale, combina a la perfección con los arreglos de cuerda y viento barrocos, donde la virtuosa guitarra eléctrica de Robert Fripp se integra de forma asombrosamente natural, como si siempre hubiera formado parte de ese ancestral sonido dieciochesco y aportando su original virtuosismo. Por último quiero presentar “I talk to the wind” otro ejemplo de ese espíritu que envuelve la música nacida aquel singular año. Dejo este tema en video de youtube, puesto que tiene mejor sonido que en la grabación de mi archivo gratuito. Las imágenes son bastante insignificantes, aunque bonitas, pero el tema es sublime, pertenece a un álbum publicado con posterioridad en el 2001 “The Bolondesbury Tapes”, donde se recopilan grabaciones correspondientes a la primera etapa del trío durante su estancia en Brondesbury Road , grabaciones que curiosamente fueron desestimadas por Decca en su momento. El tema “I talk to wind” se convertiría en un clásico de la emergente primera época de los gigantescos King Krimson. Todo lo demás es historia mas reciente que muchos ya conocéis. Se admiten comentarios…





Giles, Giles & Fripp
• Robert Fripp: Guitarras
• Peter Giles: Bajo
• Michael Giles: Batería, Percusión
Personal adicional
• Ted Barker, Cliff Hardy: Trombón
• R. Cohen, G. Campos, K. Isaccs, B. Pecker, W. Reid, G. Salisbury: Violín
• Coulling Juan, Rebecca Patten: Viola
• A. Ford, Charles Tunnell: Violonchelo
• Ivor Raymonde: Arreglos de cuerda
• "Las escapadas": coros
• Mike Hill, Nicky Hopkins: Teclados

9 comentarios:

  1. hola antoni, muy buena reseña para un gran disco!
    saludos desde buenos aires.

    a.

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  2. Hola me encanta tu blog . Es genial la cantidad de música que descubres de una época en la que parece que lo más conocido es solo la punta del iceberg pero no se acaban los buenos discos . Saludos

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  3. Me parece curioso el contraste del Fripp 68 y su versión más experimental y desmarcada de todos con King Crimson -y luego en solitario-. La versión original de "I Talk To The Wind" es más compacta y mantiene muchos elementos con la de KC, pero me quedo con la de los segundos... Es especial:) ¡¡Saludos!!

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  4. Un disco hijo de su época, no es que sea especialmente bueno pero si es muy interesanta para ver el gérmen de lo que sería King Crimson, pero hay que decir que el salto adelante fue titánico. Gran post.

    Saludos!

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  5. Sin duda le faltaba cierta maduracion a este proyecto (a mi modesto entender) que se concretaria con la formacion completa del primer Crimson con Ian McDonald.. Eso no quita que el material sea exquisito... Un abrazo!

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  6. Me ha parecido delicioso el sonido de esta gente, que no conocía, of course. Cada vez que vengo por tu casa aprendo mogollón. Abraxos amigo y espero que sigas así...pero cuantos grupos habían esos años?? es impresionante!!

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  7. me parece extrañimo que con la buena música que es no tuviera éxito y vendieran tan pocas copias.I talk to the wind es genial

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  8. Desde luego la época que estaba por venir con King Krimson fué algo increible, pero este disco no deja de tener algunos temas muy buenos y ya se veía el talento de Fripp asomar en algunos de ellos. Agradecido por los comments. Un saludo amigos.

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  9. En su dia no tenía ni idea de este tipo de música. Ya me daba en los dientes con poder grabar a King Crimson de unos amigos hippies que vivian en Londres y los traían en verano (qué tiempos).
    A éstos los descubrí, como a tantos, a través de la mula y me lo escuché montón de veces. Hace nueve años ahora.
    Lo extraordinario de este disco es la gente que lo intergraba y las consecuencias posteriores que tuvo. El movimiento de virtuosos era intenso por aquella época, verdadera edad de oro de la música y supongo que irrepetible.
    Muchas gracias por tus comentarios Antoni, son un regalo para la vista.

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